El sentido de la vista de las rapaces nocturnas

El sentido de la vista de las rapaces nocturnas

¿Por qué las rapaces nocturnas pueden cazar en la oscuridad de la noche?

Dibujo de mochuelo
Dibujo de mochuelo. Como ave rapaz que es, el mochuelo tiene unos grandes ojos que le confieren una vista nocturna impresionante, que lo hacen capaz de ver bien en condiciones de poca luminosidad

Unos grandes ojos, unas pupilas muy dilatables y una mayor proporción de bastones en la retina les permiten localizar y capturar las presas en condiciones de baja luminosidad.

No obstante, las rapaces también tienen conos en la retina, por lo que pueden apreciar los colores. Este detalle es importante en los búhos diurnos, como el mochuelo chico o el búho nival, para poder cazar bien de día. El búho real aprovecha su excelente vista diurna, tan buena o más que la nuestra, para cazar durante el día en periodos del año cuando escasea la comida.

La estructura reflejante de las rapaces nocturnas llamada tapetum lucidum

El tapetum lucidum, una estructura reflejante que se encuentra por detrás de la retina de muchos búhos y otros animales nocturnos, como los gatos, ayuda a concentrar los focos de luz hacia las células fotorreceptoras de la retina que se encargan de la visión nocturna, los bastones.

Gran visión en tres dimensiones de los búhos y otras rapaces

Esta clase de animales tiene la virtud, junto con los primates y muchos carnívoros, de tener una visión estereoscópica inmejorable. La orientación especial de los ojos de las aves de presa en relación a la cara les permiten ver en 3 dimensiones. Como los primates (entre ellos nosotros los humanos), los búhos y similares tienen los ojos en frente de la cabeza. Esta característica les es extremadamente útil para hacerse con sus presas, a veces muy pequeñas, como insectos y mariposas nocturnas (polillas).

No obstante, para albergar los ojos dentro del cráneo ocupando el mínimo espacio, considerando que los búhos tienen unos ojos muy grandes, los ojos de estas aves son de forma tubular. Todo ello contribuye a que los ojos se encuentren literalmente encajonados dentro de sus órbitas y a que su movilidad sea casi nula.

Gran movilidad de su cabeza

Sin embargo, esto tampoco les supone un problema para estas aves, puesto que tienen una movilidad de la cabeza enorme y son capaces de girar mucho la cabeza gracias a su flexible cuello cuando quieren ver objetos que se desplazan hacia los lados.

El ángulo de visión de lechuzas y búhos, a pesar de tener estas aves los ojos tan centrados a la cara y de ser muy poco móviles, es bastante bueno con sus 110º, sin contar con que pueden girar mucho la cabeza. La cabeza de las lechuzas y búhos puede girar completamente hacia atrás, puesto que tiene un giro de más de 180º en este sentido. Además, las rapaces nocturnas pueden bajar la cabeza 90º.

Es muy frecuente que los búhos y las lechuzas muevan la cabeza hacia los lados y de arriba a abajo para ver el entorno desde distintas perspectivas gracias al fenómeno del paralelaje.

¿Qué limitaciones tienen las aves rapaces nocturnas en su vista?

Pese a que la vista es muy buena en las aves de presa nocturnas, tiene algunas limitaciones, por ejemplo, cuando la oscuridad del ambiente es total, aunque es muy difícil llegar a estos extremos con la presencia de la luna. De ahí que sólo en noches nubladas o sin luna estas aves nocturnas no salgan a cazar.

La otra limitación del sentido de la vista de los búhos y lechuzas está cuando tienen que mirar de cerca, pero para ello tienen las vibrisas en el pico, esas plumas modificadas que les proporcionan el sentido del tacto y gracias a las cuales pueden manipular adecuadamente la comida.

* Ver más sobre: Visión de las aves

Más información sobre las rapaces nocturnas.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

13 enero, 2021

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