Torsión de estómago en perros

Torsión de estómago en pequeños animales

¿Qué es la dilatación-torsión de estómago?

En caso de torsión gástrica se debe intervenir quirúrgicamente de inmediato

La dilatación-torsión de estómago es una enfermedad muy grave que requiere intervención quirúrgica de urgencia, ya que, si no se trata a tiempo, puede causar la muerte del animal. Sin exagerar, en un par o tres de horas, el perro puede entrar en un coma irreversible y morir.

La dilatación-torsión gástrica es una distensión aguda del estómago. El estómago del perro está sujeto por dos ligamentos que, dependiendo de su talla y del volumen de la cavidad abdominal, pueden no ser suficientemente fuertes como para sostenerlo y esto puede causar que el estómago llegue a a torcerse sobre sí mismo. El peso del bazo, que está situado en posición contigua al estómago, produce el giro del intestino.

Ello provoca un colapso en el riego sanguíneo, ya que las arterias y venas que discurren por el estómago se estrangulan, impidiendo que la sangre llegue a otros órganos vitales, lo que tiene fatales consecuencias.

Esta enfermedad se manifiesta por una dilatación del estómago debido a los gases que puede complicarse rápidamente si se produce la torsión del estómago.

¿En qué animales se da la dilatación-torsión de estómago?

La dilatación-torsión de estómago se da en animales domésticos, sobre todo en perros, pero también eny rumiantes, y no se da en gatos. Es una de las enfermedades más temidas por los propietarios de razas grandes caninas.

La torsión gástrica es más habitual en razas grandes y es muy rara en perros pequeños. Ello se debe a que los perros de razas grandes suelen ser de pecho profundo con una caja torácica grande. Los perros delgados también tienen mayor predisposición a padecer esta enfermedad, aunque todos los perros, sin excepción alguna, pueden verse afectados.

En los perros de razas grandes, hay espacio suficiente para rotarse el estómago en el área que está entre las costillas y el estómago.

Las razas más perjudicadas suelen ser el Bloodhound, el Mastín de los Pirineos, el Dalmata, el San Bernardo, el Pastor alemán, el Pastor belga, el Rottweiler, el Boxer, el Doberman, los galgos, el Setter irlandés, el Gran danés, etc. Los animales nerviosos o inquietos también son más vulnerables a esta enfermedad

La torsión gástrica es más frecuente en perros de raza que en mestizos.

¿Cómo prevenir la torsión de estómago?

Este grave problema se puede prevenir con medidas alimentarias. La torsión gástrica se da porque el perro come demasiado rápido o hace ejercicio después de comer, lo que hace que ingiera mucho aire.

Tenemos que evitar que el perro coma grandes cantidades de alimento. Es recomendable fraccionar la toma de alimentos en dos comidas diarias mínimo, sobre todo para los perros de razas grandes.

Se debe evitar cualquier ejercicio violento durante las tres horas posteriores a la comida y en la hora anterior a la comida.

Deberemos vigilar especialmente si nuestro ya ha sufrido la Torsión gástrica, puesto que será más sensible a esta enfermedad que otros perros.

Controlaremos la ingesta de agua después de la comida.

Evitaremos las situaciones de estrés durante la alimentación. Deberemos proporcionar un ambiente tranquilo cuando coma nuestro perro

Es importante elegir alimentos poco voluminosos, es decir, concentrados energéticamente y no fermentables.

Los alimentos fermentables, es decir, aquellos alimentos ricos en hidratos de carbono, como los cereales predispone a la dilatación del estómago.

¿Cómo tratar la torsión de estómago?

La torsión gástrica puede ser mortal porque se estrangula el duodeno y se obstruye el flujo de sangre. Para remediarla, hay que intervenir quirúrgicamente al animal y la mortalidad aumenta conforme pasa el tiempo.

Por lo tanto; cuando se tenga la sospecha, deberemos acudir urgentemente al veterinario, ya que cuanto antes se acuda mayores serán las posibilidades de supervivencia de nuestra perro.

La intervención quirúrgica consiste en abrir el abdomen, vaciar el contenido del estómago y rehacer las sujeciones ligamentosas. Es una intervención delicada porque el animal se encuentra en un estado de choque.

¿Cómo saber si un perro tiene torsión de estómago?

La dilatación-torsión gástrica es fácilmente identificable. El perro manifiesta una serie de síntomas como:

– Se muestra inquieto, no para de moverse y se queja. También se mira habitualmente el estómago o al suelo.

– Intenta vomitar pero no lo consigue y sólo arroja saliva espumosa en abundancia.

– Eructa o sufre espasmos abdominales.

– Su abdomen se hincha y se pone tenso. Si se le golpea la zona afectada con la mano, suena como un tambor (sonido timpánico).

Más información sobre los animales.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

26 abril, 2019

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