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Baños para disminuir la tensión y relajar el organismo
¿Que son los baños relajantes?
Los baños relajantes son aquel tipo de baños que están destinados a relajar el organismo. Se utilizan como terapia para tratar el estres, la ansiedad, el nerviosismo o la tensión del trabajo diario.
¿Qué se utiliza para realizar baños relajantes?
Los baños relajantes se realizan utilizando la bañera como lugar para realizar el baño. Se llena la bañera con agua caliente procurando que la temperatura se encuentre sobre los 30 grados. Esta no debe exceder de los 32 ºC.
Se utilizara el termostato de la bañera, en caso de que ésta lo tenga, para conseguir que el agua se mantenga a esta temperatura. En caso contrario, se puede utilizar un termómetro de agua para la misma finalidad.
¿Que productos se utilizan en el baño para relajar?
Una vez que el agua de baño haya alcanzado su temperatura ideal se procederá a añadir en el agua del baño las substancias que consiguen la relajación corporal. Estas substancias son muy variadas. Entre ellas tenemos las siguientes:
– Aceites esenciales: Debemos utilizar aquellos aceites que resultan adecuados para relajar. Entre los aceites esenciales para el baño con propiedades relajantes tenemos, por ejemplo, el aceite esencial de lavanda, el aceite esencial de naranjo o el aceite esencial de sándalo.
El uso de aceites esenciales con propiedades excitantes NO resultaría adecuado en este caso, como es el caso de aceite esencial de romero, o el aceite esencial de menta
– Productos populares para baños relajantes: Son productos que tradicionalmente se han utilizado mezclados con el agua del baño para relajar. Entre estos tenemos los siguientes: el bicarbonato de sodio (Añadir una taza de bicarbonato a la bañera), la leche (Verter un litro de leche dentro del agua de la bañera)
– Plantas medicinales para baños relajantes: Se pueden añadir infusiones de plantas medicinales al agua de baño para conseguir efectos relajantes.
Plantas adecuadas para un baño relajante
Los masajes o los baños con plantas relajantes resultan a veces muy útiles para relajar el cuerpo tensionado por una situación de estrés, de nerviosismo o ansiedad. Entre las muchas plantas que se pueden utilizar para realizar baños tranquilizantes, tenemos las siguientes:
Salvia: ( Salvia officinalis) Añadir al agua del baño la Infusión de 3 cucharadas de planta seca en un litro de agua. Tomar un baño durante 15 o 20 minutos
Tomillo: (Thymus vulgaris) Es un relajante y somnífero muy suave. En situaciones de cansancio o pesadez general se puede aplicar un baño relajante añadiendo en el agua de la bañera una buena porción de infusión de flores de tomillo. (Aquí influye mucho el aminoácido lisina, que resulta imprescindible en el organismo para que los jóvenes tengan un adecuado crecimiento y cuya falta puede provocar, entre otros síntomas, la sensación de cansancio o pesadez general) Una infusión muy ligera, a razón de una cucharadita de té por taza de agua ayuda a conciliar el sueño.
Albahaca: (Ocimum basilicum) Diluir una infusión de flores secas en el agua del baño.
Tila: (Tilia sp.) (Diluir un par de infusiones realizadas con una cucharada de flores de tilo por taza de agua en el agua del baño)
¿Cómo se realizan los baños relajantes?
Una vez tengamos la bañera preparada con el agua a punto y el producto adecuado para relajar, procederemos a realizar el baño relajante teniendo en cuenta las siguientes pautas:
- – El baño debe ser de una duración máxima de 15 minutos.
- – El baño se acompañará con una musica relajante adecuada.
- – De los 15 minutos que debe durar el baño, durante los primeros 5 minutos se debe procurar mantener la mente en blanco, concentrándose en la música y disfrutando de las caricias del agua.
- – Pasados los 5 minutos de relajación total, se continuará con un automasaje corporal en el que todo el cuerpo debe masajearse con una esponja de masaje y procurando que el masaje se realice desde cualquier parte del cuerpo hacia el corazón.
- – Terminados los 15 minutos del masaje, se procederá a realizar una ducha de agua fría, empezando por los pies y en dirección a la cabeza. De esta manera se conseguirá estimular el organismo para despertarlo del posible entumecimiento que podría conducir un masaje relajante. Al mismo tiempo, esta ducha fría mejora la circulación.
- – Después de esta ducha fría, envolveremos el cuerpo con toallas calientes o con una bata. También resulta adecuado meterse en la cama durante unos 5 minutos.
- – Finalmente, una vez relajados, nos pondremos en piel y aplicaremos crema sobre la piel para hidratarla.
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12 septiembre, 2020
