¿Por qué las mariquitas son tan llamativas?

¿Por qué las mariquitas son tan vistosas?

Función de la coloración de las mariquitas

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Foto de mariquita asiática (Harmonia axyridis)

Los cuerpos de las mariquitas son de vivos colores para indicarles a sus posibles depredadores que son animales venenosos.

Si alguna vez, hemos sujetado una mariquita con la mano, nos habremos dado cuenta que desprende un líquido de intenso olor y color, que para los animales que las quieren comer es repulsivo o incluso tóxico en algunas especies.

Origen de la coloración de la mariquita

Los colores vivos y más claros que tiene este invertebrado, como el rojo o el naranja, se deben a la acumulación sobre su dorso de distintos pigmentos naturales llamados carotenoides.

La melanina es la responsable del color negro de los puntos de las mariquitas. La melanina es el mismo pigmento que tenemos la personas en nuestra piel y que nos da el tono bronceado.

No todas las mariquitas son de vivos colores

No todas las mariquitas basan su estrategia defensiva en la coloración aposemática o coloración de advertencia, sino que algunas de ellas adquieren una coloración de camuflaje, como Aphidecta obliterata.

Aphidecta obliterata es una vaquita de San Antonio de tonos pardos y posee una baja toxicidad comparada por ejemplo con la mariquita de siete puntos, de color rojo intenso.

Esto es así porque se ha visto que está relacionada la toxicidad de estos insectos con la vistosidad de su cuerpo.

Por lo tanto, las mariquitas que son de colores muy llamativos también suelen ser más tóxicas que aquellas que tienen una coloración mucho más apagada.

En el mundo del aposematismo o forma que tiene un animal de demostrar que es peligroso, no siempre el aspecto físico llamativo de una especie es sinónimo de toxicidad o repugnante sabor, como sucede con los sírfidos o moscas cernidoras.

Estas especies de moscas totalmente inofensivas se hacen pasar por abejas. Las mariquitas, en cambio, son mucho más «honestas», ya que en esta familia de insectos la que indica que es peligrosa para un depredador, acostumbra a serlo.

* Ver más sobre: Aspecto físico de las mariquitas / Especies de mariquitas

También las mariquitas tienen enemigos

Aunque estos animales se encuentran relativamente protegidos por la hemolimfa que ellos mismos son capaces de excretar entre las articulaciones de sus patas, líquido con propiedades repulsivas o tóxicas, lo cierto es que aun así también tienen enemigos naturales.

Las arañas, las lagartijas, las ranas, algunas aves e insectos carnívoros, como los escarabajos carábidos, son depredadores habituales de las mariquitas. Las larvas de crisopas y sírfidos se alimentan de larvas de mariquitas.

No menos importantes son las avispas parasitoides, que controlan las poblaciones de estos insectos carnívoros, como Dinocampus coccinellae, que parasita a la mariquita de siete puntos (Coccinella septempunctata) y otras especies de mariquitas.

Aplomyiopsis epilachnae es una mosca parasitoide que ataca la catarina Epilachna borealis, por lo que es usada para controlar a esta especie perjudicial.

Las larvas de mariquita no se parecen a los adultos

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Foto de larva de mariquita del melón (Henosepilachna elaterii)

Las mariquitas son escarabajos, por lo que sufren una metamorfosis completa y antes de ser adultas pasan por la fase de huevo y de larva.

Las larvas de las mariquitas tienen una apariencia totalmente distinta a la de los adultos, pero son igual de beneficiosas, pues también se alimentan de pulgones y otras plagas de las plantas.

Las larvas de estos animales presentan el cuerpo alargado y aplanado, de color oscuro y con espinas y está provisto de tres pares de extremidades adaptadas perfectamente para la locomoción.

Ejemplos de mariquitas y sus larvas

Normalmente, las mariquitas o vaquitas de San Antonio en fase larval son de color gris azulado, pero existen excepciones, como Psyllobora vigintimaculata, cuyas larvas tienen una coloración blanquecina.

Rodolia cardinalis tiene unas crías de intenso color rojizo anaranjado o rosado, con las protuberancias internas al cuerpo más oscuras, que está recubierto por largos pelos.

La larva de la mariquita del melón, o Henosepilachna elaterii, es realmente sorprendente. Su cuerpo, enteramente amarillo, tiene protuberancias largamente ramificadas, cuyas puntas son de color más oscuro.

Las larvas de Zilus horni son pardo anaranjadas y presentan unas espinas grises azuladas muy desarrolladas.

Rhyzobius lophanthae en estado larval, en lugar de tener largas espinas, presenta pelos sobre su cuerpo de color pálido.

De la larva de Curinus coeruleus destaca su amarillenta cabecita, en cuanto al resto, se parece más a una larva de mariquita de siete puntos, aunque es de cuerpo más robusto.

Las larvas de Illeis galbula son de color crema, con la cabeza amarilla. Su cuerpo tiene manchas oscuras dispuestas en hileras.

Mas información sobre las mariquitas.

Editorial
Escrito por Editorial Equipo de Botanical-online encargado de la redacción de contenidos

22 marzo, 2021

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